martes, 21 de junio de 2016

LA CUEVA DE GORHAM (Gibraltar). Hábitat de Neandertales


El Peñón de Gibraltar es una pequeña península de roca caliza, de unos 6Km² de superficie, donde abundan los afloramientos morfosedimentarios del Cuaternario repartidos por sus diversas cuevas y fisuras.
Sin embargo, en esta pequeña extensión de terreno, se han catalogado  unas 160 cavidades y entre todas ellas la Cave de Gorham es la que guarda mayor registro arqueológico de la Prehistoria. Su nombre le viene del Capitán Gorham que la localizó en 1907. Se realizaron las primeras excavaciones en 1945, por el geólogo George Baker. Posteriormente, estos trabajos fueron continuados por John P´Arcy Waechter, que se dilataron en varias campañas, desde 1948 a 1954, donde la cueva de Gorham entró a formar parte de las cuevas con ocupaciones humanas durante el Pleistoceno; gracias a los hallazgos de niveles púnicos, neolíticos y principalmente del paleolítico medio y superior.
En 1991, se inicia el proyecto de investigación “Gibraltar Caves Proyect”, dirigido por el Prof. Clive Finlayson, con el objetivo de establecer las características paleoecológicas y medioambientales de las poblaciones Neandertales.
En 1997, se amplía el grupo de estudio, bajo la dirección de C. Finlayson y el paleolitísta Francisco Giles Pacheco, con nuevas perspectivas de estudio y un equipo multidisciplinar.
La cavidad contiene un amplio depósito, con una secuencia sedimentaria de 7m de potencia, que se ha podido diferenciar en cinco niveles arqueológicos, que revelan la presencia de poblaciones cazadoras-recolectoras, del Pleistoceno hasta las sociedades clasistas iníciales del Neolítico. La secuencia cronológica abarca el final del estadio isotópico 4 y estadio isotópico 3 y 2 prácticamente hasta el Holoceno. El estadio isotópico 5 tiene un marco geocronológico del 130.000-74.000 BP. El Paleolítico Medio viene fechado entre 45.000 ± 300- 32.280 ± 420 BP (OIS-3)  y el Paleolítico Superior desde 30.200 ± 700- 25.670 ± 280 BP (OIS-2); durante este periodo se ha registrado, en un nivel III, la presencia del Homo sapiens, que utilizaba una tecnología lítica tanto del solutrense como del magdaleniense. Todo el conjunto tecnocultural de este periodo está relacionado con flechas bifaciales, punzones y azagayas de hueso, también viene asociado con manifestaciones de arte parietal, con grabados y pinturas con representaciones de caballos, bóvidos, caprinos, cérvidos y negativos de manos humanas.
En el nivel IV, referente al tecnocomplejo musteriense es donde se ha comprobado la supervivencia de poblaciones de Homínidos Neandertales, con unas dataciones de 24.010- 26.070 KaBp.
Hasta la fecha, no se ha registrado en la península ninguna población de neandertales, en una zona tan meridional, con esas dataciones, lo que le configura una singularidad particular, que la podemos englobar gracias a las buenas condiciones medioambientales que pudieron disfrutar estas poblaciones.
Su hábitat típico mediterráneo, con zonas ricas en bosques, acompañadas de lagunas costeras, llanuras arenosas y acantilados rocosos; donde se desarrolla una rica y variada fauna típica de estos biotopos, como el ciervo (Cervus elaphus), cabra montés (Capra ibex), jabalíes (Sus scrofa), conejos (Oryctulagus cuniculus), Bóvidos, así como la presencia de focas, delfines y moluscos. Sin embargo no se ha registrado fauna domestica.
Las condiciones climáticas en esta zona acompañada de su morfología geológica han supuesto que se desarrollase una rica variedad de especies de aves en concreto hasta 151 especies fósiles. Esta variedad de especies engloba a especies típicas de humedales, de zonas boscosas, de acantilados y de costa; por lo que se determina que Gibraltar contaba con una variedad ecológica que en otras zonas próximas no se contemplan.
Uno de los modos de vida de los Neandertales era la caza, pero se ha determinado mediante el estudio tafonómico, que en tres cavidades de la roca, estos cazaban sus presas no con fines alimenticios sino ornamentales, como eran las plumas de las alas de aves rapaces y córvidos. Otra evidencia de la caza sistemática, que también se atribuía a los humanos anatómicamente modernos, es la caza de palomas salvajes. En esta cavidad se ha estudiado evidencias de que los neandertales cazaron palomas salvajes, que formaría parte de su dieta. Para su estudio se ha contado con un registro fósil, con una cronología comprendida entre los 67.000 y 28.000 BP. Este hecho ha llevado a los investigadores a determinar que los neandertales utilizaron las mismas estrategias de caza que los humanos modernos.
Gracias a la experiencia y conocimiento en el campo de la Prehistoria, el maestro Francisco Giles, en la campaña del  año 2012, descubrió en una de las paredes de la cavidad, en concreto en la zona más profunda y  sobre una plataforma sobre-elevada de unos 40 cm, unas líneas entrecruzadas, grabadas en la roca. Estas líneas consisten en 8 trazos principales, que se entrecruzan oblicuamente de manera incompleta. Un grupo de cinco líneas interceptan a las anteriores, con un trazo más corto, fino y menos profundo. Este grabado se localiza en el nivel IV asociado a un conjunto musteriense. Este hallazgo ha sido sometido a una serie de análisis microscópico, realizado por Joaquín Rodríguez Vidal, y a una comparativa experimental que revela que estos surcos fueron grabados con un artefacto lítico tallado, seguramente preparado de forma intencional para realizar este tipo de trabajo. Por lo que nos encontramos con una de las primeras evidencias de representación ornamental y simbólica del arte rupestre, lo que pone en evidencia una vez más el poder cognitivo de los neandertales.
En general, podemos afirmar que en el Peñón de Gibraltar se acreditan unos registros paleontológicos y antropológicos muy interesantes para el estudio del cuaternario mediterráneo, que nos permiten documentar procesos de ocupación Histórica y modos de vida y de trabajo muy similares, por las diferentes sociedades que han ocupado el medio, desde etapas de cazadores-recolectores del Pleistoceno a ocupaciones Históricas.
Todas estas características, en el registro arqueológico, que son indispensables para la reconstrucción del Proceso Histórico, han llevado al Reino Unido a elegir la cueva de Gorham, junto a otros lugares de Inglaterra, Escocia y Gales, como candidata a convertirse en Patrimonio Mundial de la Humanidad. Espero que la decisión de la UNESCO sea la acertada y este equipo multidisciplinar, encabezado por Finlayson y Francisco Giles, pueda ver su trabajo recompensado después de tantos años de investigación y esfuerzo. Desde aquí, mis FELICITACIONES a todos los miembros del equipo por el trabajo desarrollado durante estos años, se obtenga o no ese galardón, pero servirá para que todos podamos comprender el valor del fenómeno artístico paleolítico, y apreciar la particularidad de los grupos humanos, demostrando su diversidad cultural.
Con fecha del 15 de julio de 2016, el Comité del Patrimonio Mundial de la Unesco ha declarado la cueva de Gorham como Patrimonio Cultura de la Humanidad. Mis felicitaciones principalmente para la familia Finlayson que ha sido la que ha llevado todo el peso y responsabilidad de los trabajos tanto de investigación como de gestión que se necesitan para conseguir este galardón.

Referencia:
- J. Rodríguez- Vidal, F. dÉrrico, F. Giles, R. Blasco, J. Rosell, R. Jenning, A. Queffelec, G. Finlayson, D. Fa, J.M. Gutierez, J. Carrión, J.J Negro, S. Finlayson, L.M. Cáceres, M. Bernal, S. Fernández y C. Finlayson., 2014: A rock engraving made by Neanderthals in Gibraltar. PNAS.

- C. Finlayson, F. Giles, J. Rodrígues-Vidal et al; 2006: Late survival of Neanderthas at the southernmmest extreme of Europe. Nature.




Vista del Estrecho desde  Cave de Gorham´s
Acceso a la cueva de Gorham
Columna estratigráfica de la cavidad. Trabajos de excavación.
Hemimandíbula de Lobo
Fragmento fósil y cráneo comparativo de Buitre Leonado.

Marcas de corte en restos de Palomas salvajes
Industria lítica 
Grabado realizado por Neandertales


http://www.gbc.gi/tv/programmes/our-neanderthals-292



lunes, 13 de junio de 2016

LA MATA

El yacimiento protohistórico de La Mata (Campanario, Badajoz) se localiza en plena comarca de “La Serena” y muy próximo al yacimiento de Cancho Roano.
Las primeras excavaciones se remontan a los años 30, del siglo pasado, pero las que han dado una proyección actual al yacimiento, con un proyecto de estudio y musealización, han sido las realizadas entre los años 1990 a 2002. Con el proyecto I+D “Arqueología y Desarrollo en la comarca La Serena: el complejo arqueológico de La Mata (Campanario, Badajoz)”. Consistente en la puesta en valor del yacimiento, con la restauración del túmulo de mayor tamaño al más pequeño. Bajo el aparente montón de tierra que se visualizaba a lo lejos se encontraba un edificio del s. VI-V a. C. Consistente  este en un espacio cuadrangular, que tuvo dos plantas. Disponía de una fachada de dos torres y se encontraba rodeado por un cercado de mampostería, un terraplén y un foso, todos estos elementos le conferían un aspecto de casa fuerte señorial.
El estudio de la estructura y los materiales recuperados en dichos espacios han permitido determinar sus funciones, que van desde un ámbito doméstico-productivo, sector de almacén hasta una posible zona residencial. Donde se llevaban a cabo actividades basadas en la preparación  y consumo de alimentos, la molienda, el almacenaje y el hilado.
Según los estados polínicos, parece indicar que el edificio se situó en la confluencia de un bosque de encinas, bien estructurado y de espacios abiertos, cercanos al arroyo Molar. En estos espacios abiertos debieron situarse los campos de cultivo, mientras que la explotación del bosque debió reportar básicamente caza, leña, bellotas y pastos para el ganado.
El estudio faunístico, palinológico, antrocológico y residuos orgánicos en recipientes de cerámica y molinos corroboran el desarrollo de un modelo agropecuario. Las especies de fauna registradas han sido mayoritariamente domésticas, revelando un predominio de vacas, ovejas-cabras, complementado por el cerdo y el perro. Las especies cazadas están representadas por ciervo, liebre, conejo y el zorro. Por otra parte, las semillas recuperadas son los cereales, las gramíneas y frutales. Aquí, la bellota ya presentaba un importante aprovechamiento, tanto para el consumo en fresco, como torrefactada y para la elaboración de harina.
En cuanto al estudio social, parece ser que, nos encontramos ente un paisaje económico y social jerarquizado. Así, lo hacen ver las prospecciones llevadas a cabo en el entorno donde se han registrado numerosos pequeños asentamientos en sus alrededores, todo ello, debido a la presencia de restos cerámicos y numerosos molinos barquiformes. Todo esto, nos viene a reflejar la presencia de pequeñas aldeas ocupadas por familias campesinas vinculadas con el edificio principal. Su conjunto, conlleva la existencia de relaciones de dependencia e interdependencia entre la aristocracia terrateniente y los campesinos asentados en estas aldeas.
Todo este modelo de ocupación territorial, de los siglos VI a V a.C, de los edificios señoriales tanto de La Mata como el de Cancho Roano, entran en una fase de decrepitud como consecuencia de la quiebra de Tartessos, pero se van consolidando nuevas culturas urbanas como la turdetana o la ibérica. Estos cambios sociales acaecidos en estos siglos, tanto en los edificios señoriales de La Mata como Cancho Roano, fueron destruidos y abandonados de forma precipitada.
A partir de entonces, se abriría el proceso de reorganización social, económica y cultural conocidos como Cultura de los Castros.

Referencia:

-Alonso Rodríguez et al, 2000: “El complejo Arqueológico de La Mata (Campanario, Badajoz). En el contexto socioeconómico del post-orientalizante extremeño. Saguntum-Plav-extra,B.