domingo, 11 de junio de 2017

VILLA ROMANA DE FUENTE ÁLAMO (Puente Genil-Córdoba).


El yacimiento de Fuente Álamo lo podemos considerar como uno de los conjuntos arquitectónicos más excepcionales de la cultura romana, tanto por sus dimensiones como por   el estado de conservación, de sus estructuras, así como, por la calidad y temática de los mosaicos figurativos y geométricos que posee.
La visita al yacimiento se realiza a través de un centro de recepción de visitantes, donde te vas introduciendo en la cultura romana a través de una serie de paneles explicativos, que se pusieron en valor entre los años 2001 y 2004, y que culminaron en 2010.
La planimetría del yacimiento se corresponde con un balneum público o termas públicas, de la primera mitad del s. I. d.C, estas piscinas se abastecían de agua del arroyo que lo circundan, y eran utilizadas por las personas que tenían poco poder adquisitivo, como eran los plebeyos o esclavos y permanecieron activas hasta el s.II d. C.
Nos encontramos en una zona donde se disfrutaba de unas condiciones climáticas excelentes, con tierras fértiles, abundancia de agua y una situación estratégica, en una encrucijada de caminos. Esto propició que sobre éste balneario público se asentara la villa romana privada de Fuente Álamo, fechada en el s. III d. C; y cuyo propietario correspondía a la élite de una sociedad rural, que disfrutaba de las exquisiteces de la vida urbana pero trasladada al campo; y es un claro ejemplo para el conocimiento del mundo agrario de la época.
En el patio, del centro de recepción, se encuentra una réplica del mosaico Nilótico, el más emblemático del yacimiento y, también, el más excepcional en la musivaria Hispana del Bajo Imperio; además se puede considerar como el primer tebeo de la Historia. 
Fue excavado en 1982, por el arqueólogo L. Alberto López Palomo que realizó varias campañas en el yacimiento.
El mosaico Nilótico constituía el pavimento de una sala, situada en una zona de baños, a la que se accedía desde una habitación calefactada. De él, se ha conservado el cuadro central, representando una temática extraña en estas latitudes, con cocodrilo, un hipopótamo, unos ibises y la personificación del dios río, que debe tratarse del Nilo, de ahí su nombre Nilótico. Alrededor cuatro ábsides, de los cuales dos se conservan íntegros, enmarcan una historia, la eterna lucha de los pigmeos y las grullas. No es el único mosaico con una iconografía de pigmeos, pues los vemos representados también en el yacimiento de Itálica, pero sí que es el único que contiene textos en latín, característico del siglo IV y V, época de esplendor de la villa. Es la primera vez que existen representaciones figuradas, en mosaicos y pintura, con asociación de texto e imagen. De modo que nos encontramos ante un texto dialogado, en el que los personajes están participando de la acción, se presentan y dialogan entre ellos en una sucesión de escenas que pueden asimilarse a los actuales tebeos.
En todos los espacios insignes de la casa se distingue una rica decoración con mosaicos, considerados obras de arte que se utilizaban para decorar el pavimento o decorar los muros, para ello se utiliza las teselas, que son pequeños fragmentos, que pueden ser de cristal cerámica o piedra para crear escenas o dibujos. La villa conserva un conjunto de pinturas, esculturas y un excelente conjunto de mosaicos como “El triunfo de Baco, “Las tres gracias” y el Mosaico Nilótico. Son un componente del estatus social y de la fortuna económica de sus propietarios.
Tras el abandono de la villa, ésta sufre un gran expolio de todos los elementos decorativos y constructivos de lujo. En el s. X es ocupada por la comunidad islámica, que reutiliza algunos espacios de la villa para la explotación de la finca, como era el cultivo y extracción de aceite, llegando a construir un molino de viga que supuso la destrucción de algunas estructuras. También, utilizaron una parte del espacio para convertirlo en una necrópolis.
Desde el año 2005, se vienen realizando excavaciones en el yacimiento arqueológico que  están aportando nuevos datos para comprender el proceso histórico, de este milenio de Historia, sobre todo para conocer los modos de vida del mundo rural, de la época. El yacimiento de Fuente Álamo supone una fuente de conocimiento cultural y turístico, para la zona, y está contribuyendo al desarrollo local dentro de una economía sostenible; y donde han sabido darles una excelente puesta en valor, con un conjunto de actividades que pueden disfrutar  todo tipo de público.