viernes, 17 de agosto de 2012

HOGARES EN EL YACIMIENTO DE MOLÍ DEL SALT

El yacimiento arqueológico de Molí del Salt se encuentra situado en el término municipal de Vimbodí (Tarragona). El contexto geológico está constituido por la formación de conglomerados y arcillas del oligoceno. El yacimiento era un saliente del terreno que funcionaba como techo natural, un abrigo, y los cazadores recolectores del paleolítico lo utilizaron como campamento temporal.
El yacimiento fue descubierto, en 1999, a raíz de unas obras, de movimiento de tierras, donde se destruyó parte del depósito, se viene excavando, desde hace diez años, bajo la dirección de Manuel Vaquero, miembro del IPHES (Instituto de Paleoecología Humana y Evolución Social).

Momento de la excavación, en Molí. Foto: IPHES

La secuencia estratigráfica corresponde a tres momentos del Paleolítico Superior, uno atribuido al Mesolítico de muescas y denticulados, que comprende los niveles superiores y los dos siguientes, que corresponden al Paleolítico Superior Final. Las fechas atribuibles por C 14, están comprendidas entre 10.840±50 y 12510±100 BP.
El registro lítico corresponde al Paleolítico Superior, con algunas diferencias diacrónicas marcadas por la representación relativa de truncaduras, buriles y raspadores. Realizados en material de sílex, en su totalidad, así como, unas lanzas elaboradas en hueso, y con decoraciones. También, la presencia de unas placas de esquistos con grabados de animales y motivos geométricos.
Lo más representativo, de este yacimiento, es la cantidad de restos óseos de conejos que se han encontrado, unos 5.000 restos óseos, significa un 90% del total del conjunto faunístico, con evidencias de haber sido consumidos por los humanos. 
Las demás especies que acompañan a este conjunto está formado por cabra pirenaica, el 7,6%, jabalí un 2%, así como ciervo. 
Parece ser que los cazadores recolectores acudían a este campamento una vez  realizadas sus actividades de caza, para realizar el procesado de la carne, y las pieles de los conejos cazados, así como, la elaboración de sus herramientas.
Habrá que esperar a los resultados de los análisis, zooarqueológicos y paleoeconómicos, que son los que determinaran la dieta de estas comunidades de cazadores-recolectores y su tránsito al neolítico.


                                                   

No hay comentarios:

Publicar un comentario