La
tafonomía, como disciplina, es utilizada
fundamentalmente en el campo de la Geología
y Paleontología, sin embargo, en las últimas décadas se está aplicando en el ámbito de las investigaciones arqueológicas.
Como
ya se ha comentado, en anteriores post, la
persona que definió la tafonomía fue el paleontólogo ruso J. A. Efremov, en 1950.
Entre
los estudios tafonómicos debemos de
tener en cuenta dos procesos que comienzan con la muerte y/o producción de un
organismo y termina con el enterramiento final y ordenación de los restos del
animal en un paleosuelo.
Uno
de estos procesos es el que sufren las entidades una vez que llegan a su
enterramiento final o destrucción total, es decir, la fosilización y se conoce
como Fosildiagénesis. Y el otro, es la Bioestratinomía que se ocupa de los procesos que tuvieron lugar
mientras las entidades producidas estuvieron al descubierto, referidas tanto a animales
como vegetales., es decir, qué acontece desde que se produce o muere un animal,
qué fenómenos ocurren en la biosfera que les afecten y qué influencia tendrán
para su estado actual.
La
primera persona en acuñar este término fue el paleontólogo J. Weigelt, en 1927,
y lo determino como Biostratomie para
determinar la orientación y disposición de los restos fósiles encontrados en
ambientes naturales y determinar, así, su significado paleobiológico.
Pero
fue a partir de 1928, cuando Richter aunó varios términos para determinar los
diferentes procesos ocurridos tras la muerte y enterramiento de los organismos y, en concreto, determino la BIoestratinomía como el estudio del modo como eran
enterrados los organismos.
En
los últimos años autores como S. Fernández López, A. K. Beherensmeyer, S.M. Kidwell,
Andrews, Renzi, etc, han considerado a la Bioestratinomía como un sistema
conceptual de la tafonomía, quedando adscrita tanto a la paleoecología,
paleobiogeografía, biocronología y para la evolución. Y por tanto ha pasado a
ser una ciencia que tiene sus propios objetivos, método y conceptos.
En
el campo de la Arqueología, la Bioestratinomía es considerada como el estudio
de los procesos tafonómicos que ocurren desde el momento en que se produce un
resto susceptible de convertirse en fósil hasta que se ocasiona su
enterramiento. Entre ellos podemos
destacar: la descomposición, fragmentación, desarticulación, bioerosión,
necrocinesis, disolución, etc.
Además, nos pueden dar información acerca de las causas de muerte del organismo, el
tipo de transporte que sufrió hasta su enterramiento y del tipo de
sedimentación del medio donde se encuentran.