lunes, 27 de julio de 2020

HALLAZGO EN ETIOPÍA DE UN HACHA DE MANO DE HUESO.

Un equipo de investigadores japoneses y etíopes han encontrado en Konso-Gardula, al sur de Etiopía, un hacha de mano fabricada con hueso de hipopótamo. Se trata de un yacimiento que ya viene dando registros de herramientas líticas bifaciales, con una técnica de producción bastante refinada, donde se aprecia una de las caras bastante afilada que nos indica una utilidad definida de corte y tiene atribuida una antigüedad de 1,75 millones de años.

El hacha tiene una antigüedad de 1,4 millones de años y es atribuida al Homo erectus. Para fabricar tal pieza, el Homo erectus utilizó el fémur de un hipopótamo, donde extrajo una pieza ovalada de unos 13 cm de largo, y que pudo ser realizada con una piedra o un martillo de hueso.

Según el análisis indica que el hacha fue usada en actividades de corte, está muy bien elaborada, y demuestra una cantidad de pequeñas extracciones laterales corticales bien controladas para darle forma de hacha de mano. Uno de los laterales de la herramienta parece más desgastada que el otro, lo que sugiere que fue utilizada para cortar por un lado y por el otro era sujetada.

Las herramientas óseas en el achelense son muy escasas en los registros, pero con éste hallazgo queda claro que el Homo erectus conocía una tecnología bastante avanzada de herramientas bifaciales, tanto para las de material lítico como óseo.

 

REFERENCIAS:

-Katsuhiro Sano, et al., 2020: A 1,4 million year old bone hanalaxe from Konso, Ethiopia, shows advanced tool technology in the early Acheulean. PNAS.

-Yonas Beyene, et al., 2013: The characteristics and chronology of the earliest Acheulean at Konso, Ethiopia.

PNAS.


Vista de las dos caras del hacha. Foto: Universidad de Tokio/PNAS

Imágenes de tomografía computarizada de un fémur de hipopótamo moderno con superficies superpuestas de el hacha de hueso. Foto: Universidad de Tokio/PNAS


Imágenes de escáner de la herramienta de hueso con extracciones laterales. Representaciones de las diferentes vistas, dorsal, lateral, ventral, inferior y superior. Con un borde afilados. Foto: Universidad de Tokio/PNAS.

Vista dorsal del hacha que indica pequeños retoques.



domingo, 19 de julio de 2020

EN EL OESTE DE SIBERÍA SE HA ENCONTRADO UN COLMILLO DE MAMUT CON CAMELLOS DIBUJADOS.

En el río Tom, en Siberia occidental, en el año 1988 durante unos trabajos de construcción fue encontrado un colmillo de mamut, de metro y medio, que contenía unos grabados de camellos.

Hasta ahora no se ha realizado un estudio completo y exhaustivo del colmillo, por parte de los especialistas, de la Universidad de Tomsk, que han hecho pruebas de radio-carbono por AMS y ha dado una datación de 13.100 -13.005 cal BP.

La superficie del colmillo está grabada con imágenes de camellos de dos jorobas, y que representan a estos animales en actitud de pelea, así como, una imagen antropomórfica. En los dibujos también se perciben flechas y una serie de líneas paralelas que podría ser la sangre del animal herido.

Un hallazgo importante del paleolítico superior tardío, que nos muestra los modos de vida de aquellas sociedades nómadas que habitaban en el área de Sibería, cazando mamuts y camellos para su supervivencia.

Referencia:

-Yury N, Esin et al., 2020: Images of camels on a mammoth tusk from west Siberia. V.22. ScienceDirect.




Dos planos de visión del colmillo de mamut.
Dos planos de visión del colmillo de mamut.


A través de fotografías macro se han identificado las imágenes de cuatro camellos. Los dibujos son poco visibles debido a que el colmillo fue muy mal conservado y almacenado, donde se aprecian las gritas del deterioro.


Calco de los dibujos de los camellos. Los grabados fueron realizados con una herramienta de corte muy afilado, además sobre una superficie redondeada.


                                

miércoles, 1 de julio de 2020

LA LANZA: ARMA UTILIZADA POR LOS CAZADORES-RECOLECTORES




La caza, como hemos comentado en otras entradas, es una actividad que cumple una función social en el sentido que se realiza en grupo y con el objetivo de alimentar a toda la comunidad, estableciéndose así una reciprocidad entre sus miembros.  Para llevar a cabo éste trabajo se elaboraron una serie de herramientas. Hoy nos vamos a centrar en las lanzas arrojadizas de mano o jabalinas, bien de madera o de hueso. No vamos a entrar a valorar otros tipos de lanzas.
Matizamos que la madera es un material que se encuentra en abundancia en la naturaleza y además es muy voluble, y asimismo es muy frágil a la descomposición, por lo que es difícil encontrar restos en el paleolítico. Aún así, se han encontrado fragmentos bastante bien conservados, gracias a las características del suelo, y casi todos los hallazgos han sido en ambientes muy húmedos.
La lanza, hasta la actualidad, podemos considerarla como la primera arma de mano, que fue concebida como medio de protección personal frente a los animales salvajes y también facultó a los humanos a enfrentarse a los depredadores; además les facilitaba las tareas de ojeo, persecución y acecho. Aunque también, hay que tener en cuenta que las lanzas arrojadas a mano tienen un papel importante en la evolución humana, su rendimiento y efectividad, como arma de caza, sigue siendo poco conocida, aunque los trabajos de experimentación que se están llevando a cabo, están dando respuestas sobre los comportamientos de estos grupos humanos.
Es por tanto un objeto o artefacto que es básico para entender la evolución social y cultural de los homínidos. Podemos definirla como un arma realizada en madera cuyo extremo es puntiagudo. Su simplicidad es la que la hace excepcional, ya que, tiene un gran alcance, es letal y es un arma muy simple, pues sólo se necesita una rama de árbol consistente.
Estas puntas mataban por penetración en un área vital del animal, normalmente, se arrojaban contra una presa o bien para rematar a un animal indefenso en una trampa o bien después de hacerlo correr hasta el agotamiento que fue una técnica utilizada en el paleolítico.
El primer registro que tenemos hasta la actualidad es la lanza de CLACTON-ON-SEA (Inglaterra), fue encontrada por un aficionado a buscar herramientas líticas. Se halló en 1911, está elaborada en madera de tejo. En un principio era recta pero debido a un mal almacenamiento y conservación fue deformándose y adquirió una forma curva. Su datación está en 420.000 años. Según los análisis, han demostrado que, fue raspada con una herramienta de pedernal, de las que se conocen como clactoniense, y la elaboraron los Homo heidelbergensis.


Otra muy antigua es la lanza de BAD-CANNSTATT (Stuttgart, Alemania), que se encontró en una cantera de travertinos. Las últimas dataciones que se han obtenido son de 400.000 años, lo más característico de éste yacimiento es la excelente conservación de los restos orgánicos, tanto de vegetales como de animales.



Lanza de SCHÖNINGEN (Alemania), en el norte del país. Es un yacimiento al aire libre, que corresponde a una turbera de una mina de lignito, que se viene excavando desde 1995. En este lugar se han localizado más de 20 yacimientos que datan del paleolítico inferior tardío. Entre los múltiples hallazgos arqueológicos se encuentran la industria lítica, y huesos con fracturación y marcas de corte. En este caso el hallazgo más insólito es que se localizaron 9 lanzas, y una jabalina, ésta última trata de un palo con doble punta. Sin embargo, las lanzas fueron elaboradas más gruesas en la parte delantera, en proporción a su longitud, y con una parte trasera mucho más afilada. Esta característica parece indicar que fueron elaboradas para ser lanzadas más que para ser clavadas a corta distancia. Tienen una datación, por termoluminiscencia, entre 337.000 a 350.000 años.
Estas armas fueron depositadas en sedimentos orgánicos en la misma orilla del lago, junto a unos 20 caballos y fueron trabajadas con ramas de abeto y pino, donde su superficie fue raspada y suavizada con herramientas de sílex. Estos instrumentos fueron utilizados por los Homo heidelbergensis, que contaban ya con una planificación en las estrategias para la caza.



En España tenemos la lanza de TORRALBA/AMBRONA (Soria); que se encontraron puntas de lanza de madera de abedul, sauce y álamo, y se les atribuye una datación de 300.000 años.
Lanza POGGETTI VECCHI (Italia). El yacimiento al aire libre de Poggetti, se encuentra en la Toscana central, y pertenece al pleistoceno medio, está datado en 171.000 años. 
Su registro se compone de una serie de palos, casi todos fragmentados, están hechos en boj (Buxus sempervirens), y tienen una longitud de 1m de largo y redondeados en un extremo y puntiagudo en el otro.
Se ha utilizado la técnica de quemarlo, parcialmente, para no tenerlo que raspar. Junto a estas herramientas también se encuentran algunas de piedra y restos de huesos de elefante (Palaeoloxodon antiquus).



Lanza LEHRINGEN (Alemania). Fue encontrada en 1948, y la utilizaron hace 120.000 años los cazadores neanderthalensis, que la tallaron en madera de tejo, con 3 cm en la parte inferior y va disminuyendo a 2 cm en el área superior. Fue utilizada para matar paquidermos, se encontró debajo de los restos de un elefante junto con cuchillos de sílex.



Lanza LJUBLJANA (Eslovenia). En 2008 fue descubierta por unos arqueólogos que estaban explorando el curso del río Ljubljana, dentro de un proyecto de acondicionamiento de dicho río. Según las pruebas radiométricas se obtuvo una datación de 38.160 ± 38.820 años. Está realizada en madera de tejo y el aspecto de color negro, de su superficie, es debido a que la madera fue endurecida con fuego. A pesar de que sólo se ha conservado la punta, es un hallazgo excepcional, ya que nos confirma su utilización.



Lanza de hueso de Rinoceronte. En la isla de Bolshói Lyajovsky, Siberia, fue descubierta una lanza de 40 cm de longitud. Y elaborada a partir de un cuerno de rinoceronte lanudo, con una antigüedad de 13.000 años. El artefacto se conserva en perfecto estado y está compuesto de una sola pieza, por lo que posiblemente tuvieron que utilizar un gran cuerno de rinoceronte adulto.



Como vemos el registro de lanzas es bastante antiguo, aunque tenemos que decir que hasta que no aparecieron las de Schöninger, no fue cuando verdaderamente los registros anteriores se tuvieron en consideración, de ahí que, algunas de ellas como las de Clacton-on-Sea estén curvadas porque se almacenaron sin saber que podría tratarse de una lanza. A partir del hallazgo de Schöninger, empezaron hacerse estudios de investigación experimental para ver su utilización; como los de Ulrich Stodiek y Harm Paulsen que han comprobado que se producía un equilibrio perfecto entre el peso y la velocidad de lanzamiento, que permitía que la lanza adquiriera la energía cinética suficiente para golpear y matar a sus presas. 
En cuanto a la lejanía del lanzamiento, se consiguieron alcanzar distancias de hasta 20m, distancia bastante considerable para dar caza a un animal.
Las primeras lanzas fueron utilizadas por los Homo heidelbergensis y Homo neanderthalensis, esto nos indica que, para llevar a cabo este tipo de tecnología, se requiere de unas habilidades cognitivas para seleccionar las materias primas, y de una flexibilidad mental, donde median varios conceptos; por un lado, vemos que está determinada para protegerse de la defensa personal de un animal, y por otro para la caza.




REFERENCIAS: 

-Aranguren, B., Revedin, A.,Amico,N.,Cavulli,F.,Giachi,G., Grimaldi, S et al., 2018: "Wooden tools and fire technology inthe early Neanderthal site of Poggetti Vechi (Italy)". Proceedings of the National Academy of Sciences. pmid: 29432163.

-Aranguren. B., et al, 2018: “Wooden tolos and fire technology in the early Neanderthal”. PNAS.

-Oakley, K., Andrews, P., Keeley, L.,Clark,J., 1977: Una reevaluación de la punta de lanza Clacton. Actas de la Sociedad Prehistorica 43, 13-30.

-Schoch,WH.,Bigga, G., Böhner, U.,Richter, P.,Terberger,T., 2015: Nuevas ideas sobre las armas de madera del sitio paleolítico de Schöningern. Journal of Human Evolution 89,214-225.

-Serangeli. J., et al, 2015: “Overview and new results from large-scale excavations in Schöninger”. Journal of Human Evolution V. 89, pp 27-45.

-Thieme,H., 1997: Lanzas de caza del Paleolítico Inferior de Alemania. Nature, 385, pp: 807-810.

-Wagner. E., 1995: Connstatt I: Gros sswildjäger im travertingebiet. Konrad Theisis Verlag, Stuttgart.