Uno de los yacimientos
arqueológicos, más espectaculares e interesantes, de la isla de Gran Canarias, es
el Cenobio de Valerón. Fue declarado, como Bien de Interés Cultural en 1978, con
la categoría de zona arqueológica.
Se localiza bajo un gran arco
natural de 30m de ancho y, a 300m sobre el nivel del mar, aprovechando las
condiciones geológicas del cono volcánico, en un profundo escarpe de la Cuesta
de Silva. Está compuesto por unas 300 cámaras u oquedades interconectadas entre
sí a varios niveles. Se trata de graneros colectivos o silos, un lugar común de
almacenamiento, de las sociedades prehispánicas de Gran Canaria. Están situados
estratégicamente porque quedan al resguardo de la humedad y de los vientos, esto
hace que estos silos estén en un lugar idóneo para la conservación de los
recursos alimentarios, de las que pendía el sostenimiento del grupo. Asimismo, nos desvelan la compleja organización
sociopolítica de estas sociedades.
Estos silos son destinados al almacenamiento, de alimentos como son la cebada, trigo, frutos
secos y semillas de higos; fueron
trabajados con herramientas de piedra y madera, de forma sistemática, hasta
configurar un gran granero. La agricultura tuvo un gran desarrollo, en esta
isla, así como, la ganadería en el resto.
Las dataciones basadas en análisis de radiocarbono, de las
semillas del grano, han dado unos resultados de 520 ± 30 BP o una calibración
convencional, que va desde 1330-1440 d. C.
Este yacimiento pasa totalmente desapercibido desde el
exterior, se encuentra en una pared vertical, pero se accede al mismo a través
de una cómoda escalera, dotada de una serie de miradores y puntos de información,
dotados con paneles informativos, que nos acerca a la Naturaleza y a la Historia,
de este lugar. Una visita muy recomendable para aquellos que les gusten la Arqueología y la Historia de los habitantes de la Isla.
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