Podemos decir que Baelo
Claudia es la ciudad hispanorromana mejor conservada de la provincia de
Cádiz. Su historia se remonta al s. VIII. a. de. C, con un núcleo originario en
el oppidum de la Silla del Papa; y
fue creciendo y desarrollándose hasta la crisis del s.III d. C, en que fue
abandonada por una serie de circunstancias, por una parte naturales y por otras
económicas, y que hasta la fecha no conocemos, pero el estudio del registro arqueológico
nos irán dando las claves de este abandono.
Según las últimas
investigaciones, ya se puede ir determinando, que Baelo Claudia fue el
resultado de la evolución del sustrato mestizo autóctono y su relación con la
llegada de poblaciones alóctonas (africanas y romanas), para llevar a cabo una
serie de actividades económicas como las pesquero-conserveras; debido a su excepcional
situación estratégica, entres dos mares, que le permite entablar un comercio
con los demás emporios norteafricanos y peninsulares.
Gracias a estas
intervenciones arqueológicas realizadas en el yacimiento, hoy día, podemos contemplar casi todos los
elementos urbanísticos de que disponía una ciudad romana, representada con una
arquitectura pública que adquiere un carácter monumental; tal es el caso del
cercado por una muralla, sus vías principales donde se distribuían sus servicios
de carácter público como: templos, la curia, el foro, los tribunales, basílica,
mercado, termas, necrópolis; y sus servicios de carácter privado como: tiendas,
tabernas, viviendas y fábrica de salazones con sus dos domus.
En este yacimiento,
los trabajos arqueológicos se vienen realizando puntualmente desde el año 1870, siendo su descubridor el
hispanista francés Pierre Paris que fue el primero que realizó una serie de
campañas y por donde han pasado, evidentemente, una serie de arqueólogos como:
Félix González, Jules Fergus, G. Bonsor, M. Pellicer, R.E Linigton, D.
Domengue, que desarrollaron sus trabajos en diferentes zonas del yacimiento.
También, hay que destacar la labor que llevaron a cabo los arqueólogos de la Casa
de Velázquez que comenzaron sus trabajos, en 1966, con la colaboración
de arqueólogos españoles como A. García Bellido, C. Posac, R. Corzo…
A partir del año
2000 al 2004, se hicieron cargo de los trabajos arqueológicos, los profesores
de la Universidad de Cádiz, Alicia Arévalo y Darío Bernal, y llevaron a cabo
una serie de intervenciones arqueológicas en la Cetariae, en concreto en
el barrio industrial meridional de la ciudad, que se puede considerar que se
trata de un barrio industrial polifuncional que correspondería a la época tardorrepublicana-ausgusta.
Estos trabajos
estuvieron enmarcados bajo los denominados Cursos Internacionales de Arqueología
Clásica, en Baelo Claudia, y se hicieron extensibles a Punta Camarinal.
Es la primera vez que se realiza, en este yacimiento, un trabajo con un equipo
multidisciplinar, dando cabida a estudios de geoarqueología, paleomorfología
del litoral, estudios polínicos, estudios de los recursos faunísticos, tanto
terrestre como ictiológico, y análisis sedimentológicos.
En este estudio, de
los restos faunísticos, llevé a cabo el análisis de la fauna terrestre. El
material óseo correspondía de los sondeos realizados en la zona tanto
altoimperial (s.II d.C) como de los sondeos de la época bajo imperial (s.III-IV
d.C).
La cabaña ganadera
tanto en una época, como en otra, era bastante homogénea con una representación
de ganado vacuno, caprino, ovino y porcino, en cuanto a las especies cinegéticas
estaban presente el ciervo, jabalí, conejos y aves, el caballo también tenía su
representación, posiblemente, sería utilizado en las labores de deforestación
del pinar que había en la zona. El paisaje en esta época era claramente
mediterráneo y antropizado, con unas condiciones climáticas, que favorecía el
asentamiento y el desarrollo de la ganadería.
Del estudio
arqueozoológico se desprende que los restos encontrados en el barrio industrial
meridional corresponden a restos de desechos de mesa, y han sido la base de
consumo de la población. También podemos afirmar que la base de su economía
ganadera no está centrada en una ganadería selectiva como ocurría en la
factoría de salazones de la zona, en concreto en la ciudad de IuliaTraducta (Algeciras),
sino que, parece ser una ganadería más indiferenciada donde se
desarrolla una cabaña diversificada, tanto a nivel de especies, como en el aprovechamiento
de las mismas.
Este barrio
industrial meridional se corresponde con un modelo urbano de sociedad donde se
desarrolla una economía pesquera-ganadera y conservera, con una tendencia
ganadera de subsistencia acompañada de una explotación industrial de salazones,
con un comercio totalmente desarrollado desde su puerto.
A partir del año
2010 al 2012 se llevó a cabo un nuevo Proyecto
General de Investigación “La economía marítima y las actividades haliéuticas en
Baelo Claudia”. El registro de estas intervenciones han dado como resultado el
descubrimiento de un suburbium en la parte oeste de la ciudad, donde se han
excavado unas Termas Marítimas, activas entre los siglos II y el V
d. C,estaban compuestas por cinco habitaciones y su frigidarium y algunas salas caldarium
que se encontraban decoradas con una rica ornamentación arquitectónica de
mármoles y esculturas entre la que se encuentra una copia del Doríforo de
Policleto, ubicado en una hornacina semicircular, que presidía la gran piscina.
También se ha podido documentar las trazas de lo que sería un cuarto acueducto
de la ciudad que tendría la función de suministrar agua al conjunto termal, así
como, un mosaico con motivos marinos.
Gracias a los trabajos geofísicos se ha podido determinar la existencia de dos
terremotos en la zona, el primero impulsó el abandono del yacimiento, en el
siglo V, y con la recuperación en la época medieval se perciben los muros de
las termas desplomados, a finales ya del siglo XIII.
Paralelamente a
estos trabajos se está llevando a cabo
otro Proyecto General de Investigación sobre “Muerte y Ritual Funerario en
Baelo Claudia” que está dirigido por Fernando Prados Martínez, profesor de la
Universidad de Alicante. Los trabajos comenzaron en 2012 y se prolongaran hasta
2018, aunque los trabajos comenzaron en 2009 y 2011 con actuaciones puntuales
de limpieza e identificación de los enterramientos y ajuares.
En la campaña de
2012, los hallazgos fueron ya bastantes prometedores con unos registros de estelas
funerarias, tumbas de cremación y sepulcros con sus ajuares completos, in situ. También hay que destacar el
hallazgo de una vía funeraria principal pavimentada y se ha determinado sus
características gracias a los trabajos de geofísica que se han aplicado, fijando
su superficie pavimentada en 4m de anchura por 1m de potencia y fue construida
a mediados del siglo I d.C. Este descubrimiento permite a los investigadores
conocer el trazado oriental de esta calzada que delimitaba la costa gaditana desde
la población de Carteia, hasta Gades.
De especial
relevancia ha sido el hallazgo de un Mausoleo
tardorromano, ataviado con una mesa de ofrendas, y varios sepulcros que
conservan sus ritos funerarios bástulo-púnicos de sus creencias religiosas y la
incorporación de nuevos dogmas religiosos a partir ya del s. I d.C.
Todo este conjunto
de restos de sepulcros, ajuares, restos de banquetes funerarios, así como, los trazados de los ejes viarios, nos darán a
conocer, cuando se ultimen los estudios, de cómo sería esta necrópolis o ciudad
de los muertos de Baelo.
En general, podemos
decir que en el Conjunto Arqueológico de Baelo Claudia se está realizando una
buena gestión del patrimonio arqueológico, así como, un modelo de educación y
gestión cultural; todo ello, conlleva un programa sostenible para la población
local. A parte de llevar a cabo tareas de prospección, excavación y
conservación del registro, se ha integrado entre sus ofertas, al visitante, una
serie de programas de dinamización y puesta en valor del mismo; a través de una
serie de actividades, que se llevan a cabo a lo largo de todo el año, como son
visitas guiadas, visitas guiadas con figurantes, ciclos de conferencias, representaciones
de teatro y actuaciones musicales. Lo que hubiese disfrutado B.B. King (que nos
ha dejado hace unas semanas) tocando su guitarra en este escenario, su swing
hubiese levantado hasta los mismos indígenas de Baelo.
Referencia:
- A. Arévalo y D. Bernal, 2007: Las Cetariae de Baelo
Claudia. Avance de las investigaciones arqueológicas en el barrio meridional. Arqueología
Monografías.
- F. Prado, I. García, H. Jiménez, 2014: “Cien años de
arqueología funeraria en el estrecho de Gibraltar: nueva investigaciones en la necrópolis
de Baelo Claudia (Tarifa-Cádiz)”. Saguntum 46.
Vista general de la ensenada de Bolonia |
Vista aérea del yacimiento |
Registro faunístico |
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